7 de marzo de 2014
Viernes Después de Cenizas
Lecturas:
Isaías 58, 1-9
/ Salmo 50, 3-6. 18-19 Tú, Señor, no desprecias el corazón contrito
y humillado
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo
9,
14-15
Se acercaron a Jesús los discípulos de Juan y
le dijeron: «¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo hacemos nosotros y los
fariseos?»
Jesús les respondió: «¿Acaso los amigos del
esposo pueden estar tristes mientras el esposo está con ellos? Llegará el
momento en que el esposo les será quitado, y entonces ayunarán.»
Palabra del Señor.
MEDITACION
El
Papa Francisco, en una de sus frases ilustradoras hacía notar
que “hay
cristianos cuya opción parece ser la de una Cuaresma sin Pascua”. Es decir, gente
que nominalmente es creyente en Jesús, pero sus rostros no transmiten la
alegría de ser seguidores de quien venció a la muerte una vez para siempre.
Los
discípulos de Juan, según este relato de Mateo, parecen entender como necesaria
una actitud penitencial más o menos permanente, mientras que el Maestro
privilegia celebrar la vida.
¿De
qué tipo de cristianos eres: de los que rezan al crucificado o de los que se
alegran con el Resucitado?
Que
lo que nos provoque tristeza no sea ser seguidores tuyo, Señor, sino los
dolores de quienes no han podido encontrar la vida resucitada en sus
existencias. Así sea.
Escogiendo
servir sólo al Dios de la Paz, el Amor y la Alegría,
Miguel.
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