13 de marzo de 2014
Jueves de la Primera Semana de Cuaresma
Lecturas:
Ester 4, 12.
14-16. 23-25 / Salmo 137, 1-3. 7-8 ¡Me respondiste cada vez que te invoqué, Señor!
EVANGELIO
Jesús dijo a sus discípulos:
«Pidan y se les dará; busquen y encontrarán;
llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca,
encuentra; y al que llama, se le abrirá.
¿Quién de ustedes, cuando su hijo le pide
pan, le da una piedra? ¿O si le pide un pez, le da una serpiente? Si ustedes,
que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre
celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!
Todo lo que deseen que los demás hagan por
ustedes, háganlo por ellos: en esto consiste la Ley y los Profetas.»
Palabra del Señor.
MEDITACION
El
evangelio durante estos recientes días nos ha querido recordar el amor
misericordioso y providente de Dios, señalándonos distintas manifestaciones de
éste.
Hoy
insiste: «el Padre celestial dará cosas buenas a aquellos que se las pidan».
En
una cultura de la solidaridad, como es la que se desprende de las vivencias del
Reino que Jesús viene a enseñar, ya que es la que realiza la voluntad del
Padre, quien necesite, obtendrá.
¿Estás
dispuesto/a a realizar tu aporte para que así sea?
Padre
bueno, que sólo quieres darnos cosas buenas, danos un corazón generoso y una
actitud cercana para transmitir algo de tu amor a nuestros hermanos. Así sea.
Queriendo ser
dóciles a la guía del Espíritu de la Paz, el Amor y la Alegría ante las
dificultades de la vida,
Miguel.
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