15 de marzo de 2014
Sábado de la Primera Semana de Cuaresma
Lecturas:
Deuteronomio 26,
16-19 / Salmo 118, 1-2. 4-5. 7-8 ¡Felices
los que siguen la ley del Señor!
EVANGELIO
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo
5, 43-48
Jesús dijo a sus discípulos:
«Ustedes han oído que se dijo: Amarás a tu
prójimo y odiarás a tu enemigo. Pero yo les digo: Amen a sus enemigos, rueguen
por sus perseguidores; así serán hijos del Padre que está en el cielo, porque
él hace salir el sol sobre malos y buenos y hace caer la lluvia sobre justos e
injustos.
Si ustedes aman solamente a quienes los aman,
¿qué recompensa merecen? ¿No hacen lo mismo los publicanos? Y si saludan
solamente a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo los
paganos?
Por lo tanto, sean perfectos como es perfecto
el Padre que está en el cielo.»
Palabra del Señor.
MEDITACION
“A
quien quiere seguirlo, Jesús le pide amar a los que no lo merecen, sin esperar
recompensa, para colmar los vacíos de amor que hay en los corazones, en las
relaciones humanas, en las familias, en las comunidades y en el mundo. Queridos
hermanos, Jesús no ha venido para enseñarnos los buenos modales, las formas de
cortesía. Para esto no era necesario que bajara del cielo y muriera en la cruz.
Cristo vino para salvarnos, para mostrarnos el camino, el único camino para
salir de las arenas movedizas del pecado, y este camino de santidad es la
misericordia, que Él ha tenido y tiene cada día con nosotros. Ser santos no es
un lujo, es necesario para la salvación del mundo. Esto es lo que el Señor nos
pide”.
(Papa
Francisco, 23 de febrero de 2014)
Que
podamos encontrar esa alegría que describe el Salmo, siguiendo tu Ley Mayor: la
del amor. Así sea.
Queriendo ser
dóciles a la guía del Espíritu de la Paz, el Amor y la Alegría ante las
dificultades de la vida,
Miguel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario