17 de marzo de 2014
Lunes de la Segunda Semana de Cuaresma
Lecturas:
Daniel 9, 4-10
/ Salmo 78, 8-9. 11. 13 ¡No nos trates según nuestros pecados,
Señor!
EVANGELIO
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas
6,
36-38
Jesús dijo a sus discípulos:
«Sean misericordiosos, como el Padre de
ustedes es misericordioso. No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no
serán condenados; perdonen y serán perdonados.
Den, y se les dará. Les volcarán sobre el
regazo una buena medida, apretada, sacudida y desbordante. Porque la medida con
que ustedes midan también se usará para ustedes.»
Palabra del Señor.
MEDITACION
Para
Jesús no vale la mediocridad.
No
vale ser cristiano a medias.
No
vale, por ejemplo, ser misericordiosos “a gotas”; la medida es, más bien, un
manantial: «como el Padre de ustedes es
misericordioso»
Es
que, el Maestro, y Dios mismo, saben que menos que eso le resta calidad a la
propia vida: vivir en el rencor es vivir en la pobreza de alma.
La
misericordia, en cambio, nos acerca a la divinidad que hay en nuestro ser. Por
lo que nos acerca a la riqueza de la felicidad en el corazón.
Que
crezcamos en el sentido de la misericordia, para bien de las relaciones con los
hermanos y para bien de nuestra alma, contribuyendo así a la felicidad de todos,
Señor. Así sea.
Transfigurándonos,
mediante la conversión, hacia el camino de la Paz, el Amor y la Alegría del Reino,
Miguel.
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