Lo importante no es quién sino qué dice

31 de Julio de 2015

Viernes de la Décimo Séptima Semana Durante el Año

Lecturas:

Levítico 23, 1. 4-11. 15-16. 27. 34-37 / Salmo 80, 3-6. 10-11 ¡Canten con júbilo al Señor, nuestra fuerza!

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo   13, 54-58

    Al llegar a su pueblo, se puso a enseñar a la gente en la sinagoga, de tal manera que todos estaban maravillados.

    «¿De dónde le vienen, decían, esta sabiduría y ese poder de hacer milagros? ¿No es este el hijo del carpintero? ¿Su madre no es la que llaman María? ¿Y no son hermanos suyos Santiago, José, Simón y Judas? ¿Y acaso no viven entre nosotros todas sus hermanas? ¿De dónde le vendrá todo esto?»

    Y Jesús era para ellos un motivo de escándalo. Entonces les dijo: «Un profeta es despreciado solamente en su pueblo y en su familia.»

    Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la falta de fe de esa gente.

Palabra del Señor.

MEDITACION

Y si es hijo del carpintero, ¿qué?; y si conocen a toda su familia, ¿en qué afecta?

Lo importante no es quién sino qué dice.

Hay algo de soberbia en la actitud de sus compatriotas, algo así como “¿qué me puede enseñar este a mí?”

Y también bastante de baja autoestima: ¿por qué no podría salir alguien importante de su pueblo?

A ver si no hemos dejado que nos ocurra algo semejante o vayamos a permitirlo en otra ocasión, para que por soberbios, por creernos poca cosa o por torpes no nos perdamos un mensaje importante para nuestras vidas.

Que tengamos los sentidos alertas a los diferentes medios y, especialmente, a las personas que portan Palabras de Vida para nuestra vida, Señor. Así sea.

Alimentándonos, juntos como hermanos de humanidad, del Pan de la Paz, el Amor y la Alegría generosos y solidarios,

Miguel